viernes, 9 de noviembre de 2012

Nota Revista Luz




Nota Ambito Financiero


























Viernes 26 de febrero de 2011 - Placer

JULIETA KEMBLE, EX MODELO QUE CONTINÚA EL LEGADO DE SU PADRE, EL ARTISTA KENNETH KEMBLE 

"Me gusta habitar las ciudades a las que viajo"
Para pensar en su actualidad como artista, Julieta Kemble se re-monta al pasado y recuerda que su abuelo paterno era inglés, su abuela tenía madre escocesa y el resto de la familia era de origen alemán. «Creo que el lado alemán fue el que aportó la herencia intelectual y artística.
Con decir que la bisabuela de mi padre tocó el violín frente de la Reina Victoria», relata la rubia ex modelo de 37 anos, (que intenta seguir el legado de su padre, el artista Kenneth Kemble, y ha conocido las principales capitales de la moda mundial.

Nota Oh My Dog


































































ENTREVISTA + MODA
Julieta Kemble

Fue una de las modelos más lindas de los 90. Hoy se dedica a mantener viva la obra de su padre, el genial artista Kenneth Kemble, de quien heredó su amor incondicional por los gatos. Julieta vive rodeada de su familia, los cuadros de su padre y sus cinco gatas.

Que lugar tienen los gatos en la familia Kemble?
No hay Kemble sin gatos. No hay ningun Kemble, desde mi bisabuela, qua no haya tenido gatos. Mi abuela tuvo hasta un puma en su case. Cuando yo era chica, en esa misma casa, mi papa tenia diez gatos.

Como eran los gatos de Kenneth, tu padre?
Mi padre tenia una gata a la que le puso Mercedes Salinas. Mercedes era elegante y muy cariñosa. Vivió unos años mas que el. Se adoraban. Papa le daba de comer langostinos y caviar. Ojo, que también tuvimos gatos que comían lechuga.

Revista George


Nota Harpers Bazzar








































El ESTILO 
En el garaje de la casa donde vive Julieta Kemble, la obra de su padre se guarda ordenadamente. Los colores y las formas geométricas de este gran pintor argentino se dejan entrever entre los marcos de madera y Julieta las sabe manejar como nadie: mueve cuadros de dos metros de altura corno una experta galerista, sabe el lugar preciso de cada una como un curador, recuerda cuáles se han prestado o donado a muestras y subastas mejor que el más práctico marchand. Ella es, en definitiva, la guardiana de esta herencia y su trabajo día a día está puesto en revalorizar, dar a conocer y gestionar el tesoro que le dejó Kenneth Kemble. Mientras posa como una experta frente a uno de los cuadros, sus dos hijos menores, Tasio y Amalia, la observan, así como un par de los seis gatos—todos recogidos de la calle— que ronronean silenciosamente por la casa. El know how que le dieron sus pocos años en el mundo del modelaje vuelve a salirle instintivamente. Aunque sea cosa del pasado, fue otra de las tantas experiencias y carreras que esta inquieta y polifacética mujer persiguió. "Estudié primero Administración y Dirección de Empresas. Después, Periodismo. Más tarde estudié, en Nueva York, Teatro y Religiones Comparativas, para después volver y empezar Historia del Arte, que fue lo que debería haber estudiado desde el momento cero. Ahí dije: `Ahhh, entiendo todo", recuerda. "Y fue después de que mi papá se murió...", agrega reflexiva.
«No estoy atada a ninguna convención". 

Revista Hola - 2011




martes, 31 de julio de 2012

Revista La Fuga Julio 2012

 

Ph: Lucila Cummins
Thnks: Flor Braga Menéndez
Makeup: Caro Fernández con productos Clarins París.


El proyecto que culminó en la publicación de dos tomos compilando los escritos de KennetKemble, surgió desde la inquietud de su hija Julieta, que sintió la necesidad de completar y poder compartir tanto (y valioso) material, resultado de gran parte de una vida, dedicada (también) a la escritura.  Kemble fue crítico de arte del Buenos Aires Herald entre 1960 y 1972. Este talento le dio la posibilidad de expresar sus ideas tanto desde su obra artística como desde el debate crítico en relación a determinadas líneas de pensamiento ligadas a la valoración del arte con las que no concordaba. Teniendo la peculiar oportunidad de poder expresarse con igual contundencia y autoridad, tanto desde el arte como desde la crítica escrita.
Julieta es la directora del proyecto y estuvo involucrada en todos los detalles, con Florencia Batitti trabajaron sobre los textos desde el comienzo y luego se sumó Justo Pastor Mellado, quién trabajó durante diez días ininterrumpidamente con el enorme archivo de material. Finalmente, decidieron publicar dos libros: uno con toda la crítica de arte que Kemble escribió para el Buenos Aires Herald y otro con sus conferencias, prólogos y demás escritos. Los libros tuvieron su presentación en arteBA y actualmente pueden conseguirse en la librería de Malba, Yenny y El Ateneo.  Próximamente se los estará presentando en la Maison de las Ameriques Latines en París, y en esa misma ciudad, se realizará una muestra de archivo en la Embajada Argentina. Además, el año próximo tendrá lugar una muestra en Malba, también como parte del Proyecto Kemble.

Nota Revista Noticias - Julio 2012




"Mí padre nunca pudo transar con nada"

La modelo editó dos libros con las críticas sobre arte del artista plástico Kenneth Kemble. Imagen engañosa y pasión maternal.
La herencia es evidente. No solo es la misma mirada, sino también la exacta pasión y compromiso ante la vida. Julieta Kemble no pinta ni escribe, pero el legado de su padre, el artista plástico Kenneth Kemble ha ido mucho más allá de su innegable belleza. De apariencia casi frágil, le basta abrir la boca para derribar cualquier prejuicio de liviandad. Al igual que su padre, la suya es una actitud despierta, atenta al mundo y con opiniones firmes.
Inquieta, su búsqueda vocacional la llevó de sus recordados años en el modelaje a carreras tan disímiles como Economía, Periodismo. Teatro e Historia  del Arte. Y si bien no ejerce en ninguno de esos campos, los proyectos que la ocupan retornan al origen mismo de su esencia: revalorizar el legado de Kernble. En la última edición de ArteBA presentó dos libros (Entre el pincel y la Underwood- y Escritos Kenneth Kemble. Prólogos. artículos. Entrevistas. 1961-1998) con textos y criticas de arte realizadas por su padre en el diario 'The Buenos Aires Herald.”

lunes, 30 de julio de 2012

Nota Revista Hola - Mayo de 2012





Guardiana de la obra de su padre, le rinde homenaje en unas espectaculares fotos

JULIETA KEMBLE


“Me hubiera encantado que mis hijos conocieran a papa”


Heredera de la colección de uno de los artistas más representativos de la Argentina del siglo XX, habla de su nuevo proyecto editorial: un compendio de los escritos de su padre como estudioso y crítico de arte.

Apartir de 1960, Kenneth Kemble escribió decenas de columnas sobre arte en el Buenos Aires Herald y se convirtió en un destacado articulista alrededor del mundo. Hijo de un inmigrante británico llegado a Argentina en 1911 y nieto de una pintora escocesa nacida en la India, desde muy joven se volcó al arte conceptual y tomó la escritura como un instrumento para difundir sus ideas de vanguardia.
A partir de 1998 –año en que murió, a los 74– su hija Julieta (40) es la albacea de su obra y su legado. Con sumo cuidado, ha resguardado no sólo el gran patrimonio pictórico de uno de los más renombrados artistas del Informalismo, sino que también se encargó de difundir su obra como escritor y erudito del arte. Con estudios en Comercialización y Dirección de Empresas, Periodismo e Historia del Arte, Julieta es la segunda hija del artista, fruto de su relación con Berta Haendel, su cuarta mujer. Casada desde 1998 con Justo Saavedra y madre de tres hijos –Octavio (11), Tasio (7) y Amalia (5)–, hoy dirige JK, una casa editorial dedicada a la difusión del arte.
A catorce años de la muerte de su padre, Julieta rescató una de las facetas que él utilizó con coraje y lucidez para plasmar su pensamiento durante la segunda mitad del siglo XX –un momento de transición entre lo moderno y lo contemporáneo– y publicó dos volúmenes bajo su sello editorial. “Si tuviera que elegir un recuerdo de él, sería sentado en la mesa con su gin, escribiendo”, confiesa Kemble sobre un hombre que amaba a los gatos, era fanático del jazz y siempre luchó por la difusión del arte argentino en el mundo.